Vivimos tiempos apasionantes para ser educadores.
Mis padres y mis abuelos vivieron una escuela muy parecida a la que yo experimente. Mi formación universitaria no fue, tampoco, muy diferente y sorprendentemente, cuando inicie a trabajar, en 2008, lo que encontré en la la aulas fue, en su mayoría, más de lo mismo.
Hoy las cosas están cambiando, las opciones son inmensas y yo tengo la suerte de trabajar en un colegio que ha apostado irremediablemente por la innovación. Me siento feliz por ello y deseoso de compartir las nuevas experiencias que la educación nos ofrece, de las cual me siento parte.
Desde que inicie en la docencia he tenido que rediseñar mis clases en 2 ocasiones, primero para hacerlas bilingües y luego para hacerlas cooperativas. A día de hoy esto inmerso en mi tercera reconversion, nuevos caminos que quiero compartir desde este blog.
Seguimos
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